Una vez que cumplió de manera más que sobresaliente con el par de compromisos que tuvo a finales de julio y en el inicio de agosto, concretamente en los cosos de Ajacuba, Hidalgo y Lagos de Moreno, Jalisco, de forma respectiva, el matador de toros aquicalidense José María Pastor se ha metido de lleno al campo bravo, siendo una muestra de ello que ahora mismo ha desarrollado labor de tienta en el rancho Ojo de Agua, donde se ubica la dehesa de Campo Hermoso, casa de la divisa en morado, blanco y azul rey, propiedad de don Pablo Suárez Gerard, vecino del municipio de San Miguel de Allende, Guanajuato.

Es entonces el mismo José María Pastor, quien en entrevista nos habla de lo sucedido en los compromisos ya apuntados en Ajacuba y Lagos de Moreno:

“La verdad es que, en Ajacuba, con un encierro fuerte y bien presentado de Huichapan me sentí muy bien, desenvuelto y haciendo el toreo con gusto, aunque hubo que desarrollar mucho en el ruedo pues ese ganado no es fácil de lidiar. Por fortuna, todo salió bien y logré cortar tres orejas para salir en hombros junto con el matador José Mauricio.

Y por lo que se refiere a Lagos de Moreno -continuó José María- “también anduve con muchas ganas de repetir el triunfo que tuve ahí mismo en 2018, pero en esta ocasión con el ganado de San Fermín, que se prestó para el lucimiento, no acerté a la hora buena y me fui de vacío. Ni hablar así es esto, ahora que mirar para adelante”.

José María Pastor es un matador de toros con apenas un año y poco más de tres meses de alternativa y en ese lapso, poco a poco, se ha ido abriendo paso en los más de 10 festejos que lleva toreados y ahora enfoca sus “baterías” al que podría ser su entrante compromiso en el coso de la localidad hidalguense de Chicavasco, perteneciente al municipio de Actopan, pero resulta que la empresa anterior tiene un veto por adeudos, de ahí que Pastor esté a la espera de que se solucione la situación para poder actuar y así seguir con su trayectoria torera.

Mientras tanto, José María se alista en tanto que su apoderado, su primo el matador de toros Víctor Pastor, se pone en contacto con las empresas.

EL DETALLE…

Poco más de una decena de festejos lleva toreados José María Pastor en un año, tres meses y cuatro días de alternativa. Ahora se prepara en el campo bravo de cara a sus entrantes compromisos.

Foto: Sergio Espinosa