Diego Garmendia mejora poco a poco de la grave cornada penetrante de vientre que sufrió en días pasados en la Plaza «Sebastián Medina» de Monterrey, Nuevo León.

Lleva nueve días internado en el Hospital Muguerza en Monterrey, y tuvo que ser sometido a estudios y tratamientos para mejorar su salud.

Esta actuación con triunfo salió caro, para el torero quien quedó lesionado y hospitalizado: “Me voy satisfecho con el triunfo del festejo y soy un triunfador de mi mismo, por ser capaz de salir adelante y superar esta prueba de fuego”.

Hubo complicaciones en los primeros cinco días, debido a que el intestino no respondía. A consecuencia de esto fue necesario poner una sonda nasogástrica por vómitos biliosos.

“Sí intentaba comer o beber algo lo devolvía, inmediatamente con esto cambió todo y me la retiraron el fin de semana, así como dos drenajes que tenía”. expresó Diego Garmendia quien está canalizado y recibe medicamento y alimento.

Esta semana Garmendia espera ser dado de alta hospitalaria y viajar a casa de sus papás en la ciudad de México para rehabilitarte. Los próximos dos meses usará una colostomía en lo que sana la cirugía y volver lo más pronto posible a entrenar y torear.

La empresa Raúl Rocha Producciones, cumplió con los gastos “Se puso la camiseta y no tengo que quejarme”, señaló el jovencito quien se escucha apagado en su tono de voz.