Festival a beneficio de la escuela para el futuro que dirige el padre Pablo Patrick
León, Gto. 19 de abril

Ante tres cuartos de entrada en noche con gran clima y un ambientazo

Primer toro de la ganadería de Refugio Peña para el rejoneador
Pablo Hermoso de Mendoza
El toro desde que salió acusó estar reparado de la vista y huyendo no quiso acometer ninguna vez al caballo, para ser devuelto a los corrales. El primer reserva. de la ganadería titular de De La Mora con buen son.

Pablo dejó un  rejón de castigo y toreando muy bien a la grupa en banderillas en todo lo alto como es su costumbre. Dejó tres banderillas cortas, para después tomar la hoja de peral  señalando un pinchazo y recurrir al  descabello, para retirase con silencio tras aviso.

El segundo toro de la tarde de la ganadería de De La Mora un toro serio. Joselito Adame, que con el capote estuvo decoroso para revivir al toro con un fuerte puyazo.

Con la muleta inició con doblones muy toreros ante un toro que siempre fue humillando para hacerle una faena con mucho mérito y el toro siendo agradecidos permitiéndole tandas largas y con mucho mérito. Con la espada no estuvo bien y pinchó más de la cuenta, acertando al primer golpe de descabello, retirándose en silencio tras aviso.

Diego Silveti, en el tercer toro con el capote lo bregó con torería y señorío. Con la muleta el toro tuvo poca fuerza pero calidad y Diego, hizo  una faena con reposo, lentitud y entrega. Entregándosele el público al torero de dinastía, llegándole mucho a los tendidos para rematar con Sanjuaneras muy ajustadas dejando un estoconazo, se amorcillo el toro  y con un golpe de descabello se le concede una oreja con mucha fuerza.

Luis David Adame, en el cuarto toro  con el capote lo lanceó con torería. Con la muleta ante un toro muy complicado, deslucido trató de agradar en todo momento pero sin opción alguna después de un pinchazo una estocada entera para ser ovacionado.

Quinto toro de la noche novillo de Refugio peña para Guillermo Hermoso de Mendoza, un rejón de castigo dejó, luciéndose en las banderillas y poner el ambiente a todo en los tendidos Y torear a caballo como el sabe hacerlo, templando al novillo y llevándolo pegado a la grupa. Poniéndole pares a dos manos que emocionaron al respetable acertando con el rejón de muerte doblando el novillo  sin puntilla. Para cortarle las dos orejas. Le dieron vuelta al ruedo al novillo.

JUAN Silveti, en el que cerró plaza con un novillo de gran calidad lo bordó desde el capote verónicas ajustadas y quite por gaoneras muy toreras. Con la muleta bordo el toreo en  tandas con mucho arte, hondura, temple y empaque.  El público se le entregó, terminando su faena por manoletinas para pinchar  y perder las orejas y el rabo para ser largamente ovacionado.