La tarde de este domingo 12 de marzo en el coso “San Marcos” de la ciudad de Aguascalientes se dio el tercer festejo de la Temporada Novilleril Internacional 2017 y en ella sobresalió la madurez y el torerismo de un espada que ya debe empezar a buscar ascender al siguiente nivel, el de matador de toros, a pesar de que su carrera como novillero no ha sido triunfal pero su desarrollo taurino si ha sido elocuente, progresiva y me parece que es inminente su arribo al renglón de los toreros doctorados, me refiero al chaval aquicalidense Jorge Salvatierra, a quien el juez de plaza Ignacio Rivera Río le escatimó una oreja más que bien ganada por su labor y porque además tuvo el detalle de quedarse en la plaza con una cornada de dos trayectorias en el muslo derecho, misma que sufrió en el primer astado de su lote.

Sus alternantes, el también aguascalentense Leonardo Ibarra tuvo una actuación en la que a pesar de no estar toreado si evidenció avances y por si fuera poco fue perjudicado por el mismo juez de plaza al mandar un arrastre lento inexistente a su segundo astado. Mal y de malas la autoridad. Y el gaditano Diego Luque, nuevo en esta plaza, quien estuvo cerca del triunfo pero no le alcanzó.

Ha sido preocupante entonces la actuación del juez de plaza Ignacio Rivera Río, quien no sé si se deja orientar por su asesor y su cambiador de suertes, pero la verdad es que en esta ocasión ha tenido una participación con dos yerros flagrantes al no otorgar una oreja que la gente pidió y al conceder un arrastre lento “fantasma” en medio del descontento general. No puede ser que toda la plaza esté de acuerdo y él no lo entienda.

Así que ante casi tres cuartos de entrada en tarde de lluvia previa, cielo despejado, nublado, frío y mucho viento, se lidiaron seis astados de buena presencia de la dehesa michoacana de Real de Valladolid, siendo buenos los corridos en segundo y sexto lugares; regulares fueron el cuarto y el quinto; y complicados el primero y el tercero.

Jorge Salvatierra en el novillo que abrió plaza, de embestidas descompuestas y desarrollando sentido, veroniqueó con valor y de la misma manera lo hizo en un quite por navarras. Con la muleta su faena fue en ese tenor de valentía y torerismo, pleno de oficio y disposición por ambos lados, sobresaliendo su toreo al natural, aunque fue en el momento de lidiar por derechazos cuando fue prendido por el tercio medio de la cara interna del muslo derecho para sufrir una cornada con orificio de entrada de aproximadamente cinco centímetros y con dos trayectorias de 10 a 15 centímetros cada una, según nos lo hizo saber el doctor Carlos Hernández Sánchez como parte preliminar ya que el torero se quedó en la plaza para lidiar a su segundo astado. Finalmente a su primero lo despachó de estocada delantera y caída para ser ovacionado en el tercio.

A su segundo, un ejemplar débil, ya con un vendaje especial en el muslo derecho y sin importarle estar herido, Salvatierra lanceó con empeño y su labor muleteril ha tenido conocimiento de causa y entendimiento, todo con mucha disposición y viviendo pasajes de mucha importancia por el pitón izquierdo que le llegaron fuerte al público. Mató de certera estocada, vino la petición de oreja y el juez de plaza simplemente hizo “oídos sordos” a ella y no la otorgó ante el descontento del público. Sin embargo, Jorge dio una vuelta al ruedo con mucha fuerza y por su propio pie se fue a la enfermería para de ahí ser trasladado a la clínica Guadalupe, donde fue intervenido quirúrgicamente.

Leonardo Ibarra al primer ejemplar de su lote lo intentó recibir en los medios con una larga cambiada pero fue arrollado, resultando con raspones en la cara y un golpe en la rodilla izquierda, al tiempo que en medio del descontrol en el ruedo, el veterano monosabio Inés Limón en su afán por querer auxiliar al torero, éste igualmente fue atropellado hasta sufrir una cornada chica en el brazo izquierdo y una contusión en el cuello. Una vez que se llevaron al monosabio al hospital y que se recuperó Ibarra, éste regresó a la cara del astado un tanto cuanto aturdido pero con muchas ganas de agradar al instrumentar verónicas y chicuelinas. Tras el segundo tercio se destocó el banderillero zacatecano Heideguer Chávez. Con la sarga, Leonardo en medio de muchas dudas y desconfianza logró pasajes brillantes sobre todo por el perfil izquierdo pues logró naturales que bien hubiera firmado el maestro Lorenzo Garza, además de otros detalles muy toreros. No acertó al matar y fue aplaudido tras un aviso.

A su segundo, un astado noblote y soso, Leonardo lo capoteó con variedad y voluntad. Vino un buen puyazo de Cruz Prado y el banderillero Heideguer Chávez volvió a ser ovacionado en el tercio. En su quehacer de muleta, tras brindarle al empresario Juan Carlos López de los Reyes, Ibarra se dejó ver más asentado y creyéndose de verdad lo que hacía pero una vez más las dudas lo atacaban. Sobresalió lo que hizo por el lado derecho y con la espada se puso pesado para que fuera aplaudido tras un aviso y de pronto sorprendió el juez de plaza con el mandato de un arrastre lento increíble.

El de La Línea de la Concepción, provincia española de Cádiz, Diego Luque, quien así debutaba en ruedos mexicanos, a su primero lo lidió con el capote de manera variada pero sin mucha quietud. Con la franela hizo el toreo voluntarioso y valiente por los dos lados, mejor por el derecho, incluido un susto sin consecuencias. Terminó de estocada honda para escuchar palmas.

Y en el que cerró el festejo, uno de los dos mejores novillos del hato de Real de Valladolid, Luque estuvo discreto con el capote. Buen puyazo de José Isabel Prado y el rehiletero Heideguer Chávez se hizo ovacionar nuevamente en el tercio. Con la muleta, tras empezar por alto de rodilla y de pie rematar con desdén y el de pecho, Diego se dio a torear por ambos pitones con cierto lucimiento, destacando lo que hizo por el derecho, incluyendo toreo en redondo. Sin embargo, no pudo mantener el nivel del trasteo y se vino a menos. No acertó al matar y se le despidió entre aplausos y un aviso.

FICHA: AGUASCALIENTES, Aguascalientes. Tercer festejo de la Temporada Novilleril Internacional 2017. Coso “San Marcos”. Entrada: Casi tres cuartos con lluvia previa, cielo despejado, nublado, viento y frío. Novillos bien presentados de Real de Valladolid, siendo buenos los corridos en segundo y sexto lugares; regulares fueron el cuarto y el quinto; y complicados el primero y el tercero. Jorge Salvatierra: Al tercio, vuelta al ruedo y cornada en el muslo derecho. Leonardo Rivera: Palmas tras un aviso y palmas tras un aviso. El español Diego Luque, quien se presentó en esta plaza: Palmas y palmas tras un aviso.

INCIDENCIAS: El juez de plaza Ignacio Rivera Río tuvo una desafortunada actuación al negarle una oreja válida a Jorge Salvatierra y ordenar un arrastre lento inexistente al quinto astado. Los picadores Cruz Prado y José Isabel Prado fueron ovacionados. Y el banderillero Heideguer Chávez se desmonteró en tres astados.

Fotos Efrén González