El pasado sábado 5 de este mes, pasado el mediodía, en el municipio hidalguense de Apan, concretamente en el cortijo “El Caminante”, propiedad del matador de toros Rodrigo Ochoa, se celebró el cierre de año del Taller de Tauromaquia de la Ciudad de México (TTCDMX), mismo que es dirigido por el diestro Salvador López, con la tienta de cuatro vacas procedentes del rancho Cocinillas, donde se encuentra la dehesa lugareña de Heriberto Rodríguez, casa de la divisa en guinda y oro, propiedad de los Sucesores de don Heriberto Rodríguez Díaz, según nos lo informa el colega y amigo Ángel Sainos
Los alumnos de edad variada pertenecientes a este taller, se comenta, pasaron una gran tarde con becerras que se prestaron para que pusieran a prueba lo que han aprendido para lidiar reses bravas, pero, sobre todo, para que vivieran y sintieran de cerca la experiencia de ponerse delante y aguantar la embestida de ellas para con ello avivar su afición y poner en práctica las clases que les han impartido los maestros Aarón Rodríguez, Luis Conrado y el propio Salvador López.
De esta manera, dichos matadores aconsejaron a los noveles aficionados y estuvieron atentos a la lidia para auxiliarlos, además de estar presentes igualmente los matadores Rodrigo Ochoa y Xavier Gallardo, así como el novillero Luis Manuel Castellanos y los periodistas Eduardo Castillo y Luis Miguel Martínez, quienes han destacado como aficionados prácticos.
Toda la jornada de este fin de año del Taller de Tauromaquia de la Ciudad de México que, por segundo año consecutivo ha sido un éxito, se vivió con gran orden y cuidando siempre cumpliendo con las medidas sanitarias. Sin duda, se dice, esta experiencia ha resultado inolvidable para los que se decidieron a tomar los avíos y sentirse toreros.
