Ante media entrada se dio la cuarta corrida en la Plaza Nuevo Progreso de Guadalajara, con una tarde con gran ambiente y clima.

Se lidiaron  tres toros de Javier Garfias y tres de los Cues, extraordinariamente bien presentados. Una corrida muy seria y con Kilos.

Paco Ureña, toreó a su primero de la ganadería de Garfias con  sentimiento a la Verónica, posteriormente de ser picado, hizo un quite muy vistoso por gaoneras .

Con la muleta, el toro sacó mucha clase  y desde el principio Paco, conectó con el tendido; dándole tandas muy despacio por ambos lados, reiterando la clase del toro. Desgraciadamente lo pinchó en cuatro ocasiones, para finalmente  dejar una estocada entera desprendida, para hacerlo doblar y escuchar palmas, perdiendo la oreja.

Con el cuarto, un toro de Los Cués, poco pudo hacer con el capote. Aunque siempre puso voluntad.

Con la muleta, ante un toro que tuvo nobleza, pero que careció de transmisión, le dio tandas con la mano muy baja por ambos pitones, poniendo él lo que le faltó al toro, demostrando una gran entrega, desafortunadamente lo pinchó  y al cuarto golpe de descabello lo pasaportó. Volviendo a perder una oreja.

Arturo Saldivar, con un toro de Garfias; lo recibió con  una larga de rodillas muy ceñida.  Ya de pie, lo lanceó con decoro.

Después de picado le hizo un quite por tafalleras,  que el público le ovaciono.

Con la muleta, ante un toro bueno, con en el que siempre estuvo entregado, haciéndole una faena de mérito, que el público le reconoció. Terminar rematando por bernardinas muy ajustadas.

Señaló  un pinchazo hondo, para después dejar una  estocada entera en buen sitio y salir al tercio.

El quinto toro de los Cues, Arturo Saldivar, con el capote desde las tablas se lo llevó por chicuelinas siendo ovacionado. Con la muleta, ante un toro con toda la barba y muy serio, inició con un cambiado por la espalda en los medios, para luego realizar una arruzina y hacer vibrar el tendido.

El toro siempre embistiendo por arriba, desarrollando sentido y deslucido, le exigió y ARTURO  siempre con firmeza ,e intentándolo todo. No había materia y lo pasaportó de media estocada muy defectuosa, después un pinchazo y  media para que doblara el toro, retirándose en silencio.

Diego Silveti, con su  primero de los Cues lo toreó con mucho gusto a la Verónica , hizo un quitazo por tafalleras que el público le coreo fuertemente. Con la muleta, ante un toro bueno desde el principio, lo toreó  con mucha torería, en los medios, haciéndole una faena de altos vuelos por ambas manos,  emocionando  al público, para terminar por bernardinas con  entrega.

Desgraciadamente lo pinchó al primer viaje para después dejar  gran estocada.

Hubo nutrida petición de oreja que el juez no otorgó, haciendo la gente salir a Diego al tercio con mucha fuerza.

El sexto toro de Javier Garfias, con mucho trapío. desde que salió, acusó poca fuerza, pero con nobleza. lo toreó con el capote con mucha suavidad y gran gusto.

Con la muleta le hizo una faena para toreros, manteniendo siempre un gran nivel de torería ,lástima que el toro no transmitió. Estocada entera, siendo muy ovacionado al final de la corrida.

Paco Ureña, regaló un séptimo de Los Cués, de un gran trapío. Lo recibió de capote con gran emoción y le hizo un quitazo por verónicas. Con la muleta, el toro no se dejó; sin ritmo y derrotando la muleta. Sin embargo el Torero se metió con él, en terrenos muy ajustados, poniendo el cuerpo por carnada, consiguiendo momentos que el público le agradeció. Nuevamente falló con la espada teniendo que utilizar el descabello en tres ocasiones.