El reciente sábado en el ruedo del coso Monumental “Santa María” de la ciudad de Querétaro, el matador de toros poblano Héctor Gabriel, según lo reporta su representación, lidió y mató un par de astados y de esta manera permanece en plena y extensa preparación física y taurina, incluida la que lleva a cabo a diario en la finca queretana “Cielo Rojo”, propiedad de su actual apoderado, el matador retirado Rafael García.

De esta manera, como se sabe, el joven diestro angelopolitano no ha dejado de estar en contacto con el toro bravo en el campo o en alguna plaza, tocando ahora, como ya se mencionó, estar el pasado sábado 1 de este mes en el mencionado inmueble taurino de la capital queretana.

Así pues, bajo las debidas medidas sanitarias se lidiaron ocho toros procedentes del rancho Ojo de Agua, sitio donde está enclavada la prestigiada dehesa de Campo Real, casa de la divisa en naranja, blanco y azul rey, propiedad del escrupuloso criador de reses bravas don Juan Ignacio García Gómez, vecino del municipio de San Juan del Río, Querétaro.

Cabe señalar que en esta sesión torera se dieron cita, además del poblano Héctor Gabriel, sus colegas aguascalentenses los hermanos Joselito y Luis Adame y Juan Pablo Sánchez, donde el invitado especial resultó ser gratamente el que fuera figura del toreo Jorge Gutiérrez, así como los ganaderos de los hierros de los Sucesores de Teófilo Gómez y La Venta del Refugio.

Foto: El torero con el ganadero de Campo Real y su apoderado / Cortesía García