El matador de toros Héctor Gabriel, quien le sigue dando seguimiento a su intensa preparación en el campo bravo y toreando en algunos cortijos, no se siente ajeno a la preocupante situación que se vive en su natal ciudad de Puebla, donde su alcaldesa tiene bien metida la idea de atentar contra la Fiesta de los Toros, por lo que el torero se siente comprometido a defender a capa y espada la que es su fuente de trabajo y la de la gente que está en su entorno taurino profesional. 

Por lo pronto, el reciente martes 2 de este mes, Héctor, se trasladó al municipio guanajuatense de San Miguel de Allende, pues a invitación del escrupuloso ganadero don Pablo Suárez Gerard, estuvo en el rancho Ojo de Agua, sitio donde se ubica la afamada ganadería de Campo Hermoso, casa de la divisa en morado, blanco y azul rey. 

Una vez ahí, junto con su colega el local Francisco Martínez protagonizaron una más que interesante mano a mano en la lidia a muerte de cinco toros bien presentados, mismos que arrojaron un más que satisfactorio resultado, de nota alta, pues permitieron que sus lidiadores explayaran su oficio, técnica y arte, quedando contentos tanto el ganadero como los espadas. 

Por ello, Héctor Gabriel hace público su agradecimiento, junto con su apoderado el diestro retirado Rafael García, al ganadero Pablo Suárez Gerard por su gran apoyo incondicional, sobre todo en la carrera de este par de buenos matadores jóvenes que vienen arreando fuerte, como lo son Gabriel y Martínez. 

Cabe señalar que en la lidia de los cinco astados de Campo Hermoso estuvieron ayudando los novilleros, el mexiqueño Cristian Antar, el queretano Alejandro Moreno y el celayense Enrique de Ayala. 

De esta manera es como el diestro de la Angelópolis no flaquea en su preparación y permanece en la ardua “lucha” para estar a punto cuando tenga que vestirse de luces y así en busca de su confirmación de alternativa en la Monumental Plaza México.