A veces, a pesar de las circunstancias que se presentan en la vida, resulta imposible comprender como es que un destacado torero, ya sea matador de toros o novillero, se vea sin actividad aun y cuando sea el espada de los llamados punteros en el escalafón, siendo un ejemplo de ello el caso del estupendo novillero aquicalidense Héctor Gutiérrez, con quien tuvimos la oportunidad de conversar vía telefónica.

Cuando le preguntamos ¿cómo es que ha ido librando esta larga cuarentena? fue como si le hubiéramos abierto una dolorosa herida.

“Han sido de verdad meses fatales. Ya desde febrero estaba sin torear y cuando comenzó lo de la pandemia en marzo pues peor se puso la situación porque, además, ni chance ha habido de estar en el campo. O sea que en poco más de cuatro meses no he visto ni un pitón”.

Sobre su alistamiento, Héctor nos dijo que sigue entrenándose como siempre, “todos los días estoy en las mañanas toreando de salón en el ruedo del coso ‘San Marcos’, previo alistamiento físico. De eso no me quejo, físicamente me siento más que bien”.

Gutiérrez de igual manera nos confesó que cuando no está entrenando, por esto del confinamiento sanitario, pues se la pasa encerrado en su casa viendo revistas y videos taurinos sin caer en la desesperación que puede provocar la inactividad y la incertidumbre, además de tener firme la ilusión de poder volver, primero al campo, cuando haya oportunidad y, después, verse nuevamente enfundado en un terno de luces, sobre todo cuando ya se ha hecho la promesa pública, de la empresa “Casa Toreros”, de tener la intención de montar un serial novilleril en los próximos meses de octubre y noviembre.

 

Pie. Héctor Gutiérrez no desespera y se alista con ilusión / Cortesía Plaza 1