El matador de toros poblano Jerónimo, luego del triunfo que obtuvo el reciente lunes 9 de este mes en la Feria de Ahuatepec, Puebla, se ha metido de lleno al campo bravo para ensayar su personal tauromaquia de cara a su reaparición, tras cuatro años de ausencia, el próximo domingo 15 dentro de la Feria Nacional de San Marcos 2018, ahora en su CXC edición, cuando haga el paseíllo en el coso Monumental.

Y es que, aunque nunca ha bajado la guardia, pues siempre está listo para dar la cara en cualquier plaza, entrena prácticamente de sol a sol afinando su quehacer torero, sobre todo ahora que tiene por delante el relevante compromiso que se le avecina el fin de semana entrante en el ruedo del máximo coso aquicalidense.

Una muestra de ello es que en el transcurso de la semana ha estado haciendo intensas labores de tienta, sobre todo en el de Tlaxcala, donde habrá pasaportado a puerta cerrada un par de astados, sin dejar nada en el aire, cubriendo todos y cada uno de los detalles de su alistamiento ya que con ello le está dando toda la importancia a la enorme responsabilidad que le representa el inaugurar la primera corrida de la afamada verbena abrileña, la más significativa del país y del continente Americano.

Precisamente, sobre su retorno como torero a la Feria de Aguascalientes, Jerónimo comentó: “Después de cuatro años de estar en ella, el regreso a la Monumental de Aguascalientes por supuesto que me motiva, sobre todo ahora por el momento que estoy viviendo en mi carrera. La corrida inaugural de la feria es otro plus para agradar al aficionado y dejar huella. Espero que los toros se entreguen al igual que uno para que sea una tarde redonda”.

Sobre su trayectoria en la Feria Nacional de San Marcos como matador de toros, el personalísimo diestro Jerónimo nos recuerda que fue precisamente en la Feria de Aguascalientes de 1999 donde estrenó la alternativa que tomó ese mismo año, el 6 de febrero en la ciudad de Puebla cuando el valenciano Enrique Ponce, ante la presencia de Rafael Ortega, le cedió el toro llamado “Editor” de la dehesa de Lebrija. Cuenta el torero que no tenía ni un solo contrato tras el doctorado pero gracias al triunfo que obtuvo en el serial sanmarqueño al cortarle las orejas al toro “Gallero” de Cerro Viejo, saliendo en hombros, fue que se le abrieron las puertas de muchas plazas, regresando en noviembre de ese mismo año, el 27 de noviembre, para ser testigo del doctorado que le otorgó Julián López “El Juli” a Javier Gutiérrez “El Cachorro” y terminar nuevamente de manera triunfal al obtener otros dos apéndices y así ligar su segunda y más reciente salida en volandas por la Puerta Grande del coso Monumental aquicalidense.

En total, Jerónimo en Aguascalientes ha toreado seis corridas, con el corte de cinco orejas y dos salidas en hombros.