El potosino José Sainz, apenas despertaba de la anestesia, preguntó al doctor Rafael Vázquez Bayod, si podía torear el viernes próximo en Monterrey. ¡Claro! que la respuesta fue negativa, ya que fue una cornada de unos 20 cm que impactó la arteria femoral y que al menos lo tendrá en recuperación las próximas tres semanas.
Para Sainz con tres años de novillero, este fue su bautismo de sangre y así lo expresó tras salir del quirófano.
Yo estoy consciente que el toro, te puede dar triunfos, como cornadas, y ya esperando salir de esta, pues por lo menos ir a México (finales de Soñadores de Gloria) Ya se Monterrey no se puede, pero torear en México, yo creo que sí. Argumento.
Sainz este año se metió al ciclo Soñadores de Gloria con la firme intención de lograr el mayor número de festejos actuando por diversas plazas del país y el resultado ha sido una constate en cada tarde.
De hecho, le dije a los doctores que la otra semana me dejaban torear, y me dijeron que no y a ver si para México, alcanzó todavía. Dijo un sonriente José Sainz, quien tomaba ese obsequió como un entrenamiento en vida de un novillero y pasó un accidente.
Yo no sentí en ese momento y espero poder entrenar y volver a torear. Me da coraje porque este es un parón y tenía tres fechas más, y ya no voy a poder y por algo pasan las cosas y ya será el momento indicado para reaparecer, dijo optimista un torero caído que se levantará para cumplir sus metas y objetivos.
Un grupo de amigos toreros estuvieron pendientes de la evolución de la cirugía y hasta que lo vieron se retiraron. (Cortesía y foto Edgar Mendoza)
