Quiero ser un iluso por un instante y pensar que la cordura prevalecerá tanto en la empresa como en las autoridades y en los representantes de los diestros anunciados la tarde de este martes 12 de diciembre que, amparados en el ribete de la Corrida en honor a Nuestra Señora de Guadalupe y a beneficio de los damnificados por los terremotos de septiembre pasado, harán su aparición como debe ser, sin alteraciones en el orden de actuación y que la prensa especializada cumplirá con su trabajo tal y como lo manda la ética profesional.

Sin embargo, ante las recientes disposiciones para “hacerle el caldo gordo” a un torero que en su momento, sí, fue una figura del toreo y se le respeta, pero que ahora después de mucho tiempo que no viste el terno de luces reaparece en nuestro país imponiendo de nueva cuenta sus obsesivos caprichitos atentando contra la libertad de prensa y de expresión, contraviniendo así con lo que dispone nuestra Carta Magna, además de que por medio de un absurdo discurso se haya llegado a un disque acuerdo para que no actuaran por delante los cuatro espadas españoles, dejando al último a los cuatro nuestros, que eso no es culpa de nadie, eso simple y sencillamente es el orden que debe cumplirse por reglamento en cuanto a la antigüedad de cada torero por la fecha de su alternativa.

En qué cabeza cabe que en un acontecimiento como el de este martes Joselito Adame vaya a salir como primer espada, como director de lidia, si tiene por delante a diestros como el señorito de Galapagar, “El Juli” y Manzanares. De ser así, entonces que salgan vestido de corto todos para lograr ese objetivo, tal y como lo indica el reglamento vigente.

¿Dónde ha quedado la jerarquía de la Fiesta de los Toros? ¿De qué ha servido la historia del toreo y de la Monumental Plaza México? Si de repente por esas obtusas posturitas de “Divo”, este señor de Galapagar quiere “acomodar las piezas del ajedrez a su antojo y conveniencia”. Todo envuelto en el aparente motivo del que nos va a hacer el favor de actuar a beneficio. Así no se demuestra estar con un país que le ha dado todo desde novillero, vamos, hasta en un par de ocasiones se le ha cambiado la sangre por mexicana.

Así no se demuestra ni la categoría, ni la clase y ni el don de gente. La humildad, la sencillez y la conciencia de la realidad es la que debe prevalecer y no preocuparse en tratar de ser diferente a los demás de manera absurda queriendo avasallar a los demás con sus pretensiones, siempre yendo en contra de la Fiesta Brava. ¿Para qué entonces queremos a los anti taurinos?

En fin, esperemos a ver cómo se dan los acontecimientos este martes y una vez consumados los hechos que se vienen, entonces ya emitiremos nuestro sentir sobre algo que es injusto y totalmente fuera de toda lógica.

Así que como ya se ha hecho saber, la tarde de este 12 de diciembre de 2017, en la Monumental Plaza México se dará la corrida extraordinaria a partir de las 16:30 horas, abriendo con el rejoneador navarro Pablo Hermoso de Mendoza, como debe ser y lidiando un ejemplar de La Joya.

A pie es donde viene el cachondeo, de primero irá el aguascalentense Joselito Adame, de alternativa el 7 de septiembre de 2007 en Arles y estoqueará un astado de Santa María de Xalpa.

Como segundo el de Galapagar, de doctorado en la Monumental Plaza México el 10 de diciembre de 1995, hace ya 22 años, pasaportando un burel de Jaral de Peñas.

En tercero pusieron al queretano Octavio García “El Payo”, de alternativa el 26 de octubre de 2008 en Pachuca y toreará un ejemplar de Fernando de la Mora.

De cuarto saldrá el madrileño Julián López “El Juli”, con doctorado en Nimes el 18 de septiembre de 1998 para pasaportar un astado de Montecristo.

Como quinto colocaron al tlaxcalteca Sergio Flores, alternativado el 2 de septiembre de 2012 en Bayona, lidiará un toro de Villar del Águila (léase Xajay).

En sexto actuará el alicantino José María Manzanares, doctorado en Alicante el 24 de junio de 2003, estoqueará un ejemplar de Xajay.

Y de séptimo, en su lugar obvio, irá el aquicalidense Luis David Adame, con alternativa en Nimes el 18 de septiembre de 2016 para despachar un toro de Villa Carmela.

No cabe duda que el gran coso de Insurgentes se llenará hasta el reloj pero sin duda habrá corrientes encontradas que, ojalá, no echen a perder el festejo.

Y quedan en la mesa dos preguntas que evidente nadie contestará con certeza: ¿Por qué nuestros toreros, de los que más torean en el país, aceptaron esta situación? Y ¿Por qué, que es lo que más nos extraña, también lo han consentido diestros como “El Juli” y Manzanares?, quienes junto con otro torero como Ponce, auténticas figuras del toreo, se echan al lomo toda una temporada y no se alivian con fáciles motivos para exigir más y más para cumplir con absurdos requerimientos de un torero como el de Galapagar que no se viste de luces desde hace tiempo. Que Dios reparta suerte.