Desde el municipio tlaxcalteca de Tlaxco, donde se ubica el rancho ex Hacienda de San José Tepeyahualco, donde está enclavada la ganadería de Juan Huerta, casa de la divisa en oro, plata y negro, propiedad de don Luis Rubén Hernández, según nos lo cuenta el colega y amigo Luis Miguel Martínez, dicho criador de reses bravas hizo público su parecer sobre la actual situación de la Fiesta Brava en el país, sobre en la Ciudad de México, además de celebrar una interesante tienta. 

“La unidad de todo el gremio taurino es fundamental para rescatar la Fiesta Brava, no solo en México, hay que darla a conocer y mostrar sus valores”, fue lo que comentó el administrador de la citada casa ganadera, quien, después de las labores de tienta que realizó el diestro tlaxcalteca Gerardo Sánchez, se dio un tiempo para la reflexión de la actualidad de la Fiesta de los Toros que se vive en México y particularmente en Puebla. 

Luis Rubén Hernández, sobrino del fallecido ganadero Juan Huerta Ortega, platicó abiertamente sobre la importancia de que no solo taurinos sino galleros, empresarios de zoológicos y todos aquellos grupos que conocen sobre la vida animal, formen un importante frente común porque la experiencia que dejó el cierre de los circos fue un triste final para esos animales. 

“Nos la pasamos defendiendo a la Fiesta Brava, pero hay que mostrar todos sus valores ecológicos, económicos, morales, éticos y estéticos. Aquí a la ganadería han llegado anti taurinos, pero cuando se van, se llevan una opinión distinta y si no les gusta por lo menos respetan nuestra forma de vida”, dijo Luis Rubén. 

GERARDO SÁNCHEZ, DE TIENTA 

Por otra parte, el mencionado administrador de la dehesa de Juan Huerta, fundada en 1937, abrió las puertas de su hermosa plaza de tienta para recibir al matador tlaxcalteca Gerardo Sánchez, quien brindó una clase práctica a familias que quieren conocer a profundidad la vida del toro de lidia, así como sentir las embestidas de un ejemplar. 

Para ello, Luis Rubén seleccionó dos vacas de encaste español con las que Gerardo Sánchez estuvo entonado y afinando su tauromaquia. Las eralas exigieron capacidad, oficio y disposición haciendo de la tienta una experiencia de emociones a plenitud. 

De los invitados que se “echaron al agua” destacó el arquitecto Alejandro López Zamora y su hijo Alex, quienes evidenciaron los avances de sus respectivos entrenamientos. 

TARDE DE RECUERDOS CON LA JOYA 

Entre la gente que asistió a esta tarde campera, se encontraba el ganadero de La Joya, don José Antonio González Esnaurrizar y familia. Y ya en la sobre mesa, Luis Rubén Hernández describió la gran personalidad de la que gozaba su tío don Juan Huerta Ortega, sus facetas como ganadero y empresario taurino, pero, sobre todo, de ser un intelectual de la Fiesta Brava. 

Igualmente se recordó que al papá del ganadero José Antonio, don José González Dorantes, le unió una gran amistad con Huerta Ortega, por lo que las anécdotas dibujaron una tarde plena de agradables remembranzas de una época maravillosa del toreo. 

El más reciente éxito de la ganadería de Juan Huerta se registró, precisamente, en el coso “El Relicario” de la ciudad de Puebla, en concurso de ganaderías donde compartió el triunfo con Torreón de Cañas el sábado 18 de diciembre de 2021. 

Foto Ángel Sainos