El matador de toros tlaxcalteca Alejandro Lima “Mojito” se reporta para informar que ha vivido tres días de intensa actividad en Turlock, California, donde sienta sus reales la ganadería de Pico Dos Padres, propiedad del portugués don Manuel Sousa -hijo-, y así nos lo cuenta: 

“La ganadería de Pico Dos Padres -fundada en 1975- que en español se traduce como Monte de los Obispos, es propiedad de don Manuel Sousa -hijo-, ganadero de origen lusitano e hijo del fundador de la ganadería don Manuel Sousa. 

Para los que sólo creen que el arte del toreo está reducido a nuestros países en donde se dan corridas y novilladas, esto demuestra que la tauromaquia ha trascendido a otras latitudes como al país más poderoso del mundo, Estados Unidos y, además, con esto al mismo tiempo se promueve la difusión de la Fiesta de los Toros a través de festejos que, si bien son incruentos, tienen una importante multiplicación por la geografía estadounidense y, con ello, atrae a mucho público que se ha conformado en peñas y clubes taurinos. 

Debo comentarles que el ganadero Sousa confió en mí, así que de las 35 vacas que había en el banquete, he probado la casta y la bravura de 12, así como de 11 toros que ya pasaban de los cinco años de edad, siendo cuatro que han sido los que se quedaron como sementales. 

Después de la labor de tienta, disfrutábamos de una exquisita comida portuguesa en medio de la cordialidad de nuestro anfitrión, quien con suma gentileza me dijo que estaba muy agradecido porque logré entender la forma de tentar a sus vacas y toros, pues a él le gustan series de cuatro o cinco pases y el remate para que pueda ver la lidia de cada uno y esto le lleve a evaluar si se quedan a preservar la sangre brava o se van para que su carne la degusten los comensales en los restaurantes. 

Un detalle curioso es que, cómo no hay tentador a caballo (picador), se ponen dos pares de banderillas no con arponcillos sino con clavos y así se torea porque las tientas también son incruentas. Y sí, los toros y las vaquillas pesan más, pero somos toreros dispuestos a enfrentar todo el reto que tengamos en el ruedo. 

Así pues, pude sacar pases largos y sentidos a las vaquillas y a esos toros que iban con mucha fuerza hubo que atemperarlos para correrles la mano. Fueron faenas que llenaron mis ilusiones. Ha sido una gran experiencia que me ayuda a seguir consolidando mi tauromaquia. 

Quiero agradecer a través de este importante medio de comunicación la invitación que me hizo el ganadero don Manuel Sousa -hijo- y espero contarles más el año próximo. Ahora a seguir ensayando las faenas que se trazan en mi ilusión y están por salir en la próxima corrida de toros que será en Tlaxcala el sábado 6 de noviembre”. ¡Enhorabuena y suerte matador! 

DATO 

De las 35 vacas que había por tentarse, “Mojito” probó la casta y la bravura de 12 de ellas, así como de 11 toros que ya pasaban de los 5 años de edad 

Foto: Lima