De origen queretano, con 18 años de edad, estudiante de preparatoria, de dinastía torera, pero que, en un principio, sin hacerlo nada mal, fue un prometedor jugador de futbol en el Celaya de tercera división y, después, de los Gallos del Querétaro del circuito mayor nacional, desde hace dos años, tras enfrentarse a una becerra, brotó su alma y sentimiento torero, optando por dedicarse a esta difícil profesión.

Así surgió Juan Querencia, hijo del matador de toros del mismo nombre, sobrino del diestro Rafael García y nieto del siempre bien recordado espada don Rafael García. Se metió al campo y gracias a su intuición natural, luego de una decena de tentaderos y de una estancia de seis meses en España aprendiendo con solo ver, debutó de luces con caballos el 27 de octubre de 2018 en el coso “Jorge ‘Ranchero’ Aguilar” de Tlaxcala, con astados de Santillán, saliendo al tercio. Su siguiente aparición formal fue el 25 de diciembre en Villa de Reyes, San Luis Potosí, donde cortó un rabo a un ejemplar de Cerrito de Corzo y su más reciente novillada fue el 1 de enero en Apizaco, Tlaxcala, donde se esforzó. Y apenas el pasado sábado 19 toreó un festival en Arandas, Jalisco, logrando cortar dos apéndices.

Ahora, por torear tiene en las plazas tlaxcaltecas de Apizaco y Huamantla, así como en la mexiquense de Solalpan de Temoaya. Por lo pronto, continúa con su ardua preparación en el campo bravo y está a la espera de poder actuar en otros cosos de relevancia, como la “San Marcos” de Aguascalientes. (ADARBO)