TEZIUTLÁN, Puebla. Domingo 4 de agosto.- Ante casi tres cuartos de entrada en el coso techado “El Pinal” se dio la primera corrida de la LXXVI Feria en honor a Nuestra Señora de la Asunción, donde resultó triunfador el debutante en esta plaza, el aquicalidense Leo Valadez, al caer de pie ante el público teziuteco cortando la única oreja de la función, en tanto que sus alternantes, el apizaquense José Luis Angelino dio una vuelta al ruedo, el español Ocaña Serrano ser aplaudido y avisado tras mucho esfuerzo, incluyendo un toro de regalo y el huamantleco José María Macías escuchar palmas y recados de la autoridad.
Se lidiaron ocho toros de la dehesa de Rosas Viejas, que se presentaba en en este ruedo, siendo tres astados buenos, recibiendo arrastre lento el sexto y el séptimo, además del tercero. Y un noveno de regalo, de El Vergel, según se informó, que dio regular juego.
Cabe señalar que una vez hecho el paseíllo, a quien esto escribe, tanto la empresa “Alma Taurina” como el hotel Virreynal y la estación de Radio Impacto FM, le rindieron un homenaje en el centro del ruedo por llegar a 20 años trasmitiendo la parte taurina de la Feria de Teziutlán, haciéndose acompañar por los toreros y los ganaderos. Gracias de verdad.
José Luis Angelino en el toro que abrió plaza ha estado variado con el capote y al manejar la muleta se dejó ver esforzado, sobre todo por el pitón derecho. Mató al segundo viaje de estocada para ser ovacionado.
En su segundo, muy soso, le ha hecho Angelino un más que empeñoso trasteo, de mucho mérito, para terminar de estocada entera y dar vuelta al ruedo tras un aviso, con fuerte petición de oreja.
El jienense Ocaña Serrano sabe hacer el toreo con calidad y buen trazo por ambos pitones en sus dos ejemplares. A su primero lo acabó de media estocada para ser aplaudido tras un aviso y en su segundo, que se movió más, no acertó al matar, le sonaron un aviso y al toro se le dio arrastre lento, de nombre “Triunfador”.
A Leo Valadez en su primero se le vio con mucha disposición y gustándole a la gente, fue una labor completa, plena de temple y calidad, pero falló al matar y dio aclamada vuelta al ruedo.
En el segundo de su lote, Leo ha realizado una gran faena con capote, banderillas y muleta, además de mucha emoción. Terminó de estocada contraria, se le concedió una oreja y al toro, “Granadito”, se le dio arrastre lento.
José María Macías a su primero ha estado verdaderamente valiente y torero en todo momento, sobre todo por el lado derecho. Falló al matar y fue aplaudido.
Y en su segundo anduvo igualmente esforzado, pero no atinó al matar para tener silencio y recibir dos avisos.
