El diestro Octavio García “El Payo” estuvo en la dehesa jalisciense de San Constantino, propiedad de don Juan Pablo Corona, y es que a invitación del ganadero fue que el torero se dio gusto lidiando un par de toros y tentar dos vacas.

Sin duda, este entrenamiento le vino bien a “El Payo” y sobre la tienta comentó que antes que nada estaba más que agradecido con el ganadero. Sobre las vacas señaló que tuvieron movilidad, clase y bravura. Y que con los toros fue otro “cantar” pues se tiene uno que emplear más a fondo y ello, afirma, le ha dado mayor fortaleza y siempre se aprende.

Sobre su manera de asimilar el toreo comentó que el tiempo es el que lo ha ido colocando en el sitio donde siente que su tauromaquia conecta más con la gente, por lo que todavía, considera, le falta mucho por evolucionar.

Indica Octavio que a lo largo de su carrera ha pasado por varias etapas, primero en la que había que colocarse, se desarrollaba fuera de su estilo y ello no lo tenía a gusto, pues afirma que el toreo es de las artes más transparentes que existen, que de entrada tiene un factor importante que es el miedo, lo que sensibiliza al público y al torero mismo, asegura.

Además, continúo el rubio espada, no se puede mentir, ya que al interpretar una manera de torear que no era la que él tenía mente, evidentemente libraba una lucha interna, no se sentía a gusto y ello lo reflejaba en el ruedo.

“El Payo” confiesa que ha adquirido experiencias duras, otras más difíciles, procesos de aprendizaje, pero al final le han llevado a sentir y decir “esto es lo que a mí me gusta hacer delante del toro y fuera del toro”.

Finalmente, Octavio reitera y asegura que apenas está empezando, pues ahora se siente capaz de transmitir lo que ha buscado, lo que le nace del alma y el corazón. Antes, admite que se desordenaba, pero ahora que sabe de sus virtudes y defectos es cuando se dice a sí mismo que esto es despacio, con ritmo y tranquilidad para transmitir al público lo que hace tarde a tarde en cualquier ruedo y con diferentes toros.

Sin duda, actualmente estamos la mejor versión de Octavio García “El Payo” y todo indica que aún viene más de este torero.

 

 

EL DETALLE…

“El Payo” admite que ha logrado aprender de los malos y difíciles momentos que ha vivido para salir adelante.

 

4 reses, dos toros y dos vacas, tentó “El Payo” en la dehesa jalisciense de San Constantino.

 

Foto: Óskar Ruizesparza