El ambiente fue estupendo para que el debutante con caballos lograra el triunfo de 2 orejas

Dicen que para ser torero hay que parecerlo pero también para ser novillero se tiene que dejar muy en claro, primero, su valor, pues por muy atrabancado que sea para torear, ello se aprende conforme vaya avanzando en su trayectoria y eso fue lo que demostró este domingo 25 de febrero el chaval aquicalidense Roberto Román en su debut con caballos en el arranque del serial menor 2018 en el coso “San Marcos” de Aguascalientes tras una exitosa aparición sin picadores en la pasada Temporada de Novilladas en la Monumental Plaza México, causando una más que grata impresión.

Una oreja le cortó Roberto a cada uno de sus astados en una tarde en la que tenía que ratificar el por qué triunfó en el coso de Insurgentes y así, poco a poco, fue convenciendo a su gente de que en él hay torero que puede funcionar pues tiene, además de valor, un carisma importante, terminando por salir en hombros en medio del contento general poniendo ya el listón muy alto para los novilleros que posteriormente actúen en la campaña sanmarqueña.

De esta manera, ante un lleno en legendario coso “San Marcos”, en tarde de agradable clima, se dio esta primera novillada en la que se lidió un encierro de la dehesa jalisciense de Cerro Viejo, justa de presencia y con poca fuerza, sobresaliendo los astados jugados en segundo y quinto lugares.

Como primer espada actuó el local Jorge Salvatierra, a quien la suerte le sigue dando la espalda en el ruedo del coso “San Marcos”. Pechó con el lote menos propicio y aun así su disposición quedó de manifiesto, pero por mucho que se esforzó, sus astados no lo ayudaron. En su primer novillo escuchó palmitas y en el otro dividió las opiniones tras un aviso.

Quien debe pensar muy bien qué es lo que quiere como torero es el también aguascalentense Leonardo Ibarra. Tuvo en sus manos el lote más toreable del hato cerroviejeño. Sus trasteos fueron entre altibajos y muchas dudas. Sin embargo, en su descargo tenemos que decir que cuando se la cree y se acomoda pega estupendos muletazos pero si tiene que hacer un profundo examen de conciencia para saber hasta dónde quiere llegar. En uno salió al tercio y el otro fue aplaudido.

Y Roberto Román, haciendo de lado las palizas que se llevó en sus dos novillos, pues a golpes siempre ganará el astado, su actuación tuvo determinación, actitud y ganas de triunfar pues las orejas que cortó fueron, una, por los magníficos muletazos que le dio a su primero “Gallero” y, la otra, por una soberbia estocada al que cerró plaza “Guantero” y así ganarse la más que merecida salida en hombros.

Cabe señalar que los tres toreros alternaron en quites pero ninguno atinó en ellos, se vieron atropellados y con la “brújula” perdida.

Al final de cuentas lo que importó fue lo que evidenció Roberto Román en su presentación formal como novilleros y ante sus coterráneos, pero lo que si tiene que afinar el torero es su técnica y oficio porque lo demás lo tiene y eso no se compra en la tiendita de la esquina, valor y empatía con el público.

FICHA TÉCNICA

LUGAR: Aguascalientes, Aguascalientes.

EVENTO: Primera novillada de la Temporada 2018.

PLAZA: “San Marcos”. Entrada: Lleno en tarde agradable.

NOVILLOS: Cerro Viejo, justos de presencia y de poca fuerza. Segundo y quinto fueron los más toreables.

CARTEL: Jorge Salvatierra: Palmas y división de opiniones tras un aviso. Leonardo Ibarra: Al tercio y palmas. Roberto Román, quien debutó con caballos: Una oreja y una oreja, con salida en hombros.