Guadalajara, Jal. (Por Chano Sandoval) Plaza «Nuevo Progreso». Segunda corrida de feria.
Siete toros de Campo Real (7o) de regalo y uno de San Pablo (8o) de regalo, bien presentados y variado juego.

Sebastián Castella sale a hombros por una gran faena a un toro de regalo y «Calita» y Ferrera cortan sendas orejas.

Al término del paseíllo se le rindió un reconocimiento al matador Manolo Arruza por sus cincuenta años de alternativa. Dio una sentida y ovacionada vuelta al ruedo. En una tarde despejada y muy agradable

Don Beto saltó al ruedo en primer lugar un hermoso ejemplar negro bragado veleto de cornamenta, lidiando por el matador Antonio Ferrera (Fucsia y Oro con cabos negros)
Brindó al matador Manolo Arruza. El español perdió la postura en las primeras tandas, luego se recompuso y corrió la mano con sentimiento y profundidad principalmente por el lado derecho, aunque el astado le enganchó la muleta en varias ocasiones. Al tirarse a matar dejó más de media estocada pero el toro también cobró su muerte proporcionando un fuerte golpe en el vientre al matador. Fue necesario utilizar la cruceta y al segundo intento término con si adversario. Salida al tercio (para mi gusto no muy merecida).

El segundo toro «Dentista» tocó en suerte al francés Sebastian Castella (Noche y Oro) tras ser picado el animal, lo probó con un par de mandiles y gaoneras muy ceñidas para rematar con una media muy torera. Llevó al toro a los medios con doblones de castigo, para después pegarle dos tandas por derecho, luego buscó el ceñimiento. El francés pegó dos tandas en redondo que emocionaron al tendido. Luego de dos pinchazos, el toro había doblado y el puntillero lo levantó . Ovación.

Ernesto Javier “El Calita” (Botella y Oro) se fue a la puerta de los sustos para recibir a “Zapatitos” con una larga cambiada. Con la muleta se le vio un tanto eléctrico, con el compás demasiado abierto y sin lucir la línea curva, aun así el tendido coreó sus tandas con sentidos ¡oles! Cerró con una tanda de manoletinas andantes, para dejar una estocada un poco desprendida. Oreja.

Después de la media tarde “Don José” fue el cuarto de la tarde lidiado por Antonio Ferrera el toro fue pitado en su salida por su poco trapío y por arrastrar un tanto la pata derecha. La tarde se le vino cuesta arriba al torero español, entre los pitos contra el juez y contra el toro, el respetable poco apreció la labor del primer espada, que no se pudo reponer a los gritos de ¡novillero, novillero! Abrevió su faena entre vituperios contra el palco de autoridad. Pitos.

“León” saltó a ruedo en quinto lugar, el juez hizo el cambio de
despues de la primera vara y el torero francés lo increpó exigiendo un puyazo más que no se realizó. Inició la faena pegado a tablas, entre pitos de los tendidos, más a fuerza de poder la muleta el torero galo, logró someter al morlaco, dejando la muleta en la cara del toro y demostrando un gran oficio torero, callando los reclamos permutándolos por olés. Mató con una estocada fallida, salida al tercio. Al recibir la ovación regaló un toro.

Ernesto Javier “El Calita” se enfrentó al sexto de la tarde de
nombre “Arquitecto” con quien encontró el toreo vertical, encajado en riñones. Dejó estocada en buen sitio, para con el descabello terminar su tarea tras un aviso. Ovación.

“San Juanero” fue el séptimo de la tarde toro regalado por el matador Sebastian Castella, del fierro de Campo Real.
En los medios toreando por alto inició la faena, para continuar con una elegante tanda por derecho, seguida de dos tandas más por la diestra con mucha profundidad. Por el izquierdo, e toro y torero nos regalaron tandas de gran manufactura, el morlaco busca continuamente su querencia natural y poco ofrecía, más el torero a base de dejarla la muleta en la cara, logró cuajarlo en la contraquerecia, emocionando al respetable. Fue una labor que sacó pases donde no había nada, haciendo gala del buen momento que viene atravesando el francés. Mató con una estocada un tanto tendida. Dos orejas.

“Alteño” fue el octavo de la noche, de regalo de la ganadería de San Pablo que por su calidad recibió los honores de arrastre lento. Antonio Ferrera, que lo recibió toreando a la verónica, para después de picado sacar al toro con cuatro chicuelinas, el toro ofrecía embestidas de mucha calidad, que el torero español supo aprovechar por ambos pitones, corrió la mano con mucho sentimiento. Terminó con su astado al segundo viaje. Oreja.

Al final los toros de regalo rescataron la tarde, llenando de emoción lo tarde.

Foto: NTR/ Manolo Briones