La administración del matador de toros mexiquense Sebastián Ibelles informa que el torero durante esta semana tuvo la oportunidad de visitar la Hacienda El Sauz, sitio en el que está enclavada la ganadería de Maravillas, casa de la divisa en rosa y morado, propiedad de don Alfonso Cuevas Hernández, vecino del municipio de Chapantongo, Hidalgo, para realizar intensas labores de tienta de vacas.

De esta manera, el ganadero Alfonso Cuevas abrió las puertas del casco de la dehesa al diestro Ibelles, quien se hizo acompañar del novillero Julián Garibay y del picador Cesar Morales, quien fungió como tentador a caballo, para así examinar el desempeño de tres vacas, mismas que se prestaron para que el matador pusiera su tauromaquia a punto. También auxilió al diestro el joven torero de la casa ganadera Moisés Pérez Cuevas.

Se dice que resultó ser una tarde de mucho oficio y torería por parte de Sebastián y Garibay, además de voluntad y gran afición de Moisés, quien está comenzando en esta profesión. Las vacas fueron de alta nota y acudieron de largo al caballo.

Igualmente, uno de los invitados, el cineasta A. Fernández Alonso, pudo darse las llamadas “tres” con la becerra más pequeña y sentir está inigualable emoción.

Tras calificar la tienta, el ganadero Cuevas Hernández llevó al grupo de invitados, entre los cuales estaban el empresario gastronómico Fernando García, la señora Diana Morales viuda del matador Mariano Ramos, el juez de plaza Alejandro Carreola y, a los toreros, para degustar una exquisita paella y una rebanada de pastel festejando el cumpleaños del criador de bravo y gran anfitrión don Alfonso.

La plática, se apunta, durante la comida y la sobremesa fue extraordinaria, comentando las incidencias de la tienta y contemplando el espectacular paisaje hidalguense que tiene está casa, un refugio ecológico de gran belleza que persiste gracias al toro bravo.

Pie. Aspectos de las intensas labores de tienta en la ganadería hidalguense de Maravillas / Fotos Ángel Sainos