Desde su más tierna infancia, el novillero Sebastián Ibelles ha tenido la puerta abierta para poder tentar en las instalaciones con las que cuenta el ganadero propietario de La Guadalupana, don Juan Flores, en Tepotzotlán, Estado de México.

Esta ocasión, el novillero con picadores recibió el apoyo del criador y de su familia, quienes le brindaron la bravura de un par de becerras, mismas que dieron alta nota, debido su calidad y a las embestidas con la cara por bajo, por lo que permitieron que Sebastián se recreará al ejecutar las suertes rumbo sus próximos compromisos.

En plena temporada de novilladas, el diestro mexiquense tuvo la oportunidad de vibrar con las embestidas de los ejemplares que representaron a la divisa integrada con los colores tabaco y azul celeste, la cual se fundó en 1987.

Vale la pena recordar que, a lo lago de este año, el mexiquense Ibelles ha toreado ocho festejos con el corte de seis orejas, entre los que destaca su encerrona del pasado 30 de junio en la plaza La Florecita.