Mientras que, por un lado, se realizaba la última corrida en la historia de la primera catedral del toreo en nuestro país, El Toreo de la Condesa, el 19 de mayo de 1946 y que el siguiente 31 de agosto iniciaba su desmantelación, por otro, el anterior martes 5 de febrero, se inauguró la segunda catedral y coso más importante del continente, además de más grande del mundo, la Monumental Plaza México, aparte de que un año después, en 1947, la estructura del coso de la colonia Roma se pasó a Naucalpan de Juárez, Estado de México, para levantar el nuevo Toreo, el de Cuatro Caminos.
Por ello, volvimos a adentrarnos en nuestros archivos y esto fue lo que encontramos sobre esta nueva plaza que se inauguró el 23 de noviembre de 1947 y funcionó de manera continuada hasta 1968, aunque en el inicio de los años 90 se reutilizó, ya techada, para dar varias corridas de toros.
Así que El Toreo de Cuatro Caminos fue una edificación que existió en los límites de lo que es ahora la alcaldía (antes delegación) Miguel Hidalgo, en la Ciudad de México, y el municipio de Naucalpan de Juárez, Estado de México, convirtiéndose así en un punto referencial para la gente que viajaba en automóvil por el llamado Anillo Periférico, que es una vialidad aledaña al sitio donde estaba ubicado el coso cuatro caminero.
Precisamente ese nombre de Cuatro Caminos viene de que la estructura del viejo Toreo estaba ubicada en lo que alguna vez fue la antigua hacienda de Los Leones, punto de referencia y entronque de cuatro antiguos caminos reales que comunicaban a la Ciudad de México con Cuautitlán, Tacuba y Huixquilucan.
Se sabe que el terreno sobre el que estaba enclavado El Toreo de Cuatro Caminos abarcaba 25 mil metros cuadrados y luego de 1968, cuando se le techó, su domo de acero tenía una altura de 60 metros, siendo por ello que su inconfundible silueta semiesférica y su ubicación, se convirtiera en un buen signo de referencia geográfica para los habitantes de la Ciudad de México y de los que llegaban a ella por la zona norte de la capital del país.
La idea original del levantamiento de El Toreo de Cuatro Caminos fue que se utilizara como plaza de toros, pero al igual que El Toreo de la Condesa, corrió con la misma pena de no haberse concluido en su totalidad, por lo que se le tuvo que dar uso para otros espectáculos como la lucha libre, el boxeo y otros eventos deportivos, artísticos y políticos.
Cabe señalar que hubo una primera plaza de toros de Cuatro Caminos que fue inaugurada en 1894 y era de madera. Y anterior a El Toreo de Cuatro Caminos, su armazón estuvo ubicado en la Colonia Roma, en lo que era la ex hacienda de la Condesa, en las calles de Oaxaca, Colima, Salamanca, Durango y Valladolid y, por ello, se le conocía como el Toreo de la Condesa, siendo inaugurado el 22 de septiembre de 1907.
Se argumenta que una de la causas del final de El Toreo de la Condesa, el 19 de mayo de 1946, fue por la inauguración de la Monumental Plaza México el anterior martes 5 de febrero de 1946, siendo vendido, según se cuenta, por sus propietarios, una de las hijas del general Porfirio Díaz y, entonces, se llevó a la ubicación citada en Naucalpan de Juárez.
Hay que apuntar que en el predio que ocupó en la colonia Roma (ahora Condesa), se edificó la primera sucursal de la tienda departamental El Palacio del Hierro, fuera de lo que ahora se conoce como el Centro Histórico, antes primer cuadro de la ciudad. Significándose que en uno de sus muros exteriores se podía apreciar la placa en bronce que recuerda que en ese lugar fue muerto el 29 de diciembre de 1940 el matador de toros Alberto Balderas por el toro “Cobijero” de Piedras Negras, justamente cuando el doctor Alfonso Gaona se estrenaba como empresario dirigiendo tal plaza en la Temporada Grande 1940-1941.
El Toreo de Cuatro Caminos tenía capacidad para 25 mil personas y era, junto con la Monumental Plaza México, la Monumental Plaza de Las Ventas de Madrid y la plaza Monumental de Valencia, Venezuela, una de las únicas plazas de categoría especial en el Orbe Taurino, además de ser las más grandes, por su capacidad, siendo la mayor, la Plaza México.
Se puso entonces en marcha El Toreo de Cuatro Caminos el 23 de septiembre de 1947, con una corrida de toros en la que actuaron Lorenzo Garza, Luis Castro “El Soldado” y Jorge Medina, quien así tomó la alternativa en el primer toro de la función, llamado “Jardinero”, muy peligroso, rezan las crónicas, marcado con el número 31, de la célebre dehesa de San Mateo, dando el primer capotazo Román “Chato” Guzmán. Señaló el primer puyazo el varilarguero Francisco Ramírez “El Corto” y clavó el primer par de banderillas el propio “Chato” Guzmán… Continuará.
DATO
En el primer cartel cuatro caminero figuraron Lorenzo Garza, Luis Castro “El Soldado” y Jorge Medina, quien tomó la alternativa, con ganado de San Mateo
