En la noche de ayer, en San Miguel de Allende, en la corrida goyesca de Insurgencia tomó la alternativa el joven mexicano Francisco Martínez «parece que estoy soñando aún, no me creo que haya cumplido el sueño tan deseado por cualquier novillero. Han sido horas de ilusión, estoy muy contento por lo vivido ayer».

La magia de un instante, del momento en que Joselito Adame y «El Payo» le daban los trastos de matador de toros, emociones a flor de piel «no podía creerlo, emoción y la incertidumbre de que va a ser ahora de mi carrera, muchos sentimientos encontrados, casi brotaron las lágrimas, era la recompensa a tanta lucha».

No pudo tocar pelo con su primer toro «estoy triste porque no estuve acertado con la espada para haberle cortado una oreja, fue un toro que no me lo puso fácil, sin transmisión, me obligó a ponerle yo lo que le faltaba, se acabó pronto pero traté de dar lo mejor de mí, poniéndole emoción a la faena con unas bernardinas, pero acabé pinchándole», en cambio con el segundo recogió una oreja como premio «tenía que jugármelo todo a una sola carta, empecé la faena en el centro del ruedo, de rodillas, con una tanda de derechazos y allí empezó a coger vuelo pese a que fue un toro también complicado, me hacía hilo. A base de garra le corté la oreja».

Consciente del difícil camino que acaba de comenzar «ayer me di cuenta del nivel al que están los matadores mexicanos. No me dejé ganar la pelea, salí a dar mi espectáculo, a pelearles las palmas y cortar las orejas. No salieron las cosas como hubiese deseado pero soy consciente del esfuerzo que tendré que hacer ahora pero estoy dispuesto a luchar para conseguir mi objetivo que no es otro que convertirme en el matador número uno de México».

Mañana le podremos ver en Tetepango «estreno mi alternativa en una corrida que me ilusiona, con un diestro que arrea fuerte como El Chihuahua y con el que me apetece mucho torear. Será una gran tarde, los dos banderilleamos, él lo hace de forma espectacular, será una tarde atractiva para la afición».

Juan Carlos Mesa

(Burladero.tv)

Foto Emilio Méndez