Amigos de la Fiesta Brava, mucho gusto en saludarlos. Las gestas heroicas y los toreros van muy de la mano, tan sólo el ser un artífice del birlibirloque es ya una gesta pues el vestirse ya sea de corto, de charro, de luces, de insurgente, de goyesco, de picassiano y de sus muchas otras variedades no es fácil ya que se debe tener un carácter más que especial para ello.

Hay otras hazañas toreras como las de los que han logrado llegar a las mil corridas y sobrepasarlas hasta rebasar los dos mil paseíllos tal y como ya lo han hecho los maestros Paco Camino y Enrique Ponce, estando por llegar a esa cifra otro diestro de magisterio de la talla de Julián López “El Juli”.

Sin embargo, a las proezas taurinas que se les cataloga como auténticas gestas son, sobre todo, las encerronas y las varias actuaciones en un solo día, siendo protagonistas de ello muchos matadores de toros de aquí y de allá, aunque igualmente lo han hecho novilleros.

Y es que toda esta introducción se debe precisamente a que el próximo sábado 16 de septiembre de 2017 el novillero guanajuatense Francisco Martínez habrá de actuar en dos festejos ese mismo día, uno a las 16:00 horas en el coso “Carlos Arruza” de Pedro Escobedo, Querétaro y, el otro, a las 18:00 horas, en la plaza también queretana de Juriquilla.

Con este motivo, se recordó que en 1997, en su etapa como novillero, el espada madrileño Julián López “El Juli” lo hizo de manera exitosa en tres plazas el mismo día.

Pero existe otro antecedente, el de abril de 1983, cuando el lagunero Valente Arellano toreara tres novilladas, ocurriendo la primera a las 12:30 horas en Apan, Hidalgo, donde toreó ganado de Reyes Huerta mano a mano con Curro Madrid (hijo del maestro Paco Ortiz). La segunda se registró a las 16:00 horas en el coso Monumental “Vicente Segura” de Pachuca, Hidalgo, alternando con Manolo Mejía y Alberto Ortega en la lidia de astados de Manuel Martínez.

En dicho festejo, Valente sufrió un puntazo en la pantorrilla izquierda y la rotura del hueso acromio clavicular izquierdo. Así se trasladó a Tulpetlac, Estado de México, para cumplir a las 20:00 horas con el tercer compromiso, mano a mano con Mauricio Mendoza “El Guadalupano” para estoquear ejemplares de Montecristo. Sin embargo, al iniciar la lidia del primer novillo, éste lo acabó de lesionar de la clavícula izquierda y “El Guadalupano” se quedó con toda la novillada.

Esa noche por cierto, Valente Arellano inauguró el primer quirófano móvil del doctor Xavier Campos Licastro al tener que ser intervenido del hombro lesionado.

Así que por donde se le vea, la Fiesta de los Toros está llena de hechos significativos, de epopeyas, de odiseas y de peripecias, por eso es tan bonita y apasionante, de ahí entonces que le deseamos toda la suerte del mundo a Francisco Martínez en la aventura del 16 de septiembre y, por ello, le recuerdo que “cuando la inteligencia humana y la irracional belleza animal se conjugan en la arena ¡surge el toreo! Arte y bravura en escena”.