Foto e información: Emilio Méndez

Ante tres cuartos de entrada en el coso “Alberto Balderas”, en tarde nublada, se celebró la cuarta y última corrida del carnaval, resultando como triunfadores el español Antonio Ferrera y Juan Pablo Sánchez, éste mediante el recurso del regalo, al repartirse cuatro orejas y, por ello, salir en hombros. El otro alternante, Leo Valadez, logró hacerse de un apéndice.

Salieron ocho toros, uno, el sexto, devuelto por acalambramiento y, el séptimo, de regalo, de la dehesa jalisciense de San Constantino, siendo el primero con clase; el segundo tuvo clase, pero, fue débil; el tercero tuvo nobleza, pero, iba a media altura; bueno fue el cuarto, que fue aplaudido en el arrastre; el quinto se dejó torear; el sexto, fue devuelto a los corrales por la autoridad cuando sólo estaba acalambrado y, en su lugar, salió la primera reserva de la misma divisa titular, de buen juego y calidad y, el séptimo de regalo, fue incierto y terminó en tablas.

En el toro que abrió plaza, que acusó clase, el balear Antonio Ferrera ligó buenos lances a la verónica. Con la muleta, realizó una faena de lucida estructura por ambos pitones. Incluyendo detalles toreros. El burel se refugió en la zona de tablas y ahí lo aprovechó al máximo. Al final, pudo matar al segundo viaje y todo quedó en ovación en el tercio.

El aguascalentense Juan Pablo Sánchez a su primero, con clase, pero, débil, lo veroniqueó de manera templada. Buena vara del piquero Ricardo Morales “El Güero de la Capilla”. Con la sarga, Juan Pablo ejecutó una faena talentosa y a la altura adecuada para aprovechar la cualidad del astado, aunque llegó a perder las manos en un par ocasiones. Logró pases de calidad por los dos perfiles. No atinó al matar y fue silenciada su labor.

A su primero, un toro con 622 kilos, noble, pero, que embestía a media altura. el igualmente acalitense Leo Valadez lo recibió de rodillas al hilo de las tablas con dos largas cambiadas y, de pie, lograr verónicas de empeño, además de quitar valiente por navarras. En el tercio de varas, el picador Alfredo Ruiz “El Miura” dejó un buen puyazo. Con la pañosa, Leo, a base de entrega, le cuajó un trasteo pleno de entrega, obteniendo pases de mucho mérito. Acabó de media estocada y descabello para recibir palmas.

Ferrera en su segundo, llamado “Aficionado”, de buen juego, inició con un lance a su estilo, siguió con una veleta, obra del malogrado Rodolfo Rodríguez “El Pana” y cerró con emotivas verónicas. Tras brindarle al empresario del coso y ganadero de la tarde, don Juan Pablo Corona Rivera, con la franela, Antonio estructuró una bella pieza taurina, plena de arte e inspiración y mientras la banda amenizaba su trasteo. Así fue como “destapó el frasco de las esencias”, haciendo el toreo sentido y profundo, intercalando detalles de torería. Terminó de soberbia estocada en el segundo intento para hacerse de dos apéndices y al toro se le aplaudió en el arrastre.

A su segundo, Juan Pablo lo capoteó de forma voluntariosa. Tras tomar dos varas el toro en el caballo, en su turno, Leo quitó lucidamente por chicuelinas. Con la tela escarlata, Sánchez salió con toda la actitud para empezar doblándose y, después, realizar una faena llena de entrega, intercalando molinetes de hinojos y otros pases de buen gusto. Desafortunadamente, dejó ir el triunfo tras errar con el estoque, siendo ovacionado en el tercio.

Al ejemplar que cerraba el festejo, que salió acalambrado, Leo vio como el juez de plaza, sin más ni más, lo regresó a los corrales y, en su lugar, entró al ruedo la primera reserva, “Noble” de nombre, de buen juego y calidad, de la misma ganadería titular, al que Valadez saludó con templadas verónicas y mejor quitó por zapopinas. Cubrió el segundo tercio, destacando dos pares al violín que emocionaron al público. Con la muleta, comenzó de rodillas para luego hacer una faena que fue a más por su entrega. Cerró con manoletinas de hinojos y lo que parecía un triunfo grande se le fue por la espada pues mató de atinada estocada al segundo viaje para, aun así, hacerse de una oreja y al toro aplaudírsele en el arrastre.

Salió el toro de obsequio, “Bravo”, incierto y que se fue a tablas, para Juan Pablo, al que lanceó de manera empeñosa. Con la sarga, le puso actitud para elaborar un trasteo que terminó en la zona de tablas y, ahí, fue cuando conectó más fuerte con el tendido para acabar de certera estocada y el juez le concedió las orejas, mismas que le fueron protestadas por cierto sector del público.

Finalizado el festejo y el carnaval autlense, el espada ibérico Antonio Ferrera, junto con Juan Pablo Sánchez, salieron en hombros.

FICHA

LUGAR: Autlán de la Grana, Jalisco.

EVENTO: Cuarta y última corrida del carnaval.

PLAZA: “Alberto Balderas”. ENTRADA: Tres cuartos en tarde nublada.

GANADO: Ocho toros, uno, el sexto, devuelto por acalambramiento y, el séptimo, de regalo, de San Constantino, siendo el primero con clase; el segundo tuvo clase, pero, fue débil; el tercero tuvo nobleza, pero, iba a media altura; bueno fue el cuarto, que fue aplaudido en el arrastre; el quinto se dejó torear; el sexto, fue devuelto a los corrales por la autoridad cuando sólo estaba acalambrado y, en su lugar, salió la primera reserva de la misma divisa titular, de buen juego y calidad y, el séptimo de regalo, fue incierto y terminó en tablas.

CARTEL: Antonio Ferrera: Al tercio y dos orejas. Juan Pablo Sánchez: Silencio, al tercio y dos orejas protestadas en el de regalo. Leo Valadez: Palmas y una oreja. Al final, tanto Ferrera como Sánchez fueron paseados en hombros.