La presentación de Diego Ventura en la inauguración de la Temporada Grande 2018-2019 de este domingo en la Monumental Plaza México dejo al público que llenó el numerado con la piel erizada.
Tras seis años de ausencia en México, el rejoneador lusitano volvió para dejarnos un compendio del bien torear, rayó en lo sublime, y nos dejó en estado de éxtasis. Bien decía Juan Belmonte que el buen toreo se hace “con sentimiento y pasión de enamorado”.
Ayer vivimos una tarde gloriosa de Diego Ventura desde que apareció su segundo ejemplar “Fantasma”, un bello jabonero de la ganadería debutante de Enrique Fraga, un toro con todas las cualidades para ser indultado: calidad, bravura, emotividad, fijeza y nobleza.
Nos deleitó con su caballo “Bombón”, con el que recibió al astado a porta gayola con la suerte de la garrocha, suerte añeja, que no deja de agradar al respetable y luego al clavar con gran habilidad y destreza una banderilla al quiebro.
La faena iba in crescendo, cuando con “Sueño” colocó un extraordinario par al quiebro y luego con “Gitano” dos magistrales banderillas al violín por el lado contrario. Cuando montó a “Dólar”, colocó un par a dos manos sin cabezada, tres banderillas cortas y luego remató con el teléfono. Era aquello algo estremecedor, tenía al público de pie, con gritos de ¡torero, torero!
La gente entregada y loca de pasión, pidió el indulto y el juez Jorge Ramos lo concedió, con lo que “Fantasma” se convirtió en el segundo toro indultado por un rejoneador en la historia de la Plaza México. Apenas el pasado 11 de febrero, Andy Cartagena indultó a “Copo de Nieve”, de la ganadería de José María Arturo Huerta.
Ventura no se conformó con lo que ya había hecho. Se bajó de su cabalgadura y nos demostró su buen toreo muleteril, lo llevó a toriles y ahí lo remató con uno de pecho. Diego estaba extasiado, el mismo no se creía lo que había vivido, fue al burladero de matadores a relajarse y luego dio una vuelta al ruedo con sus caballos “Sueño” y “Dólar”, acompañado por el ganadero Enrique Fraga.
Sin duda, el rejoneador portugués Diego Ventura ha realizado una de las mejores faenas a caballo en la historia de la Monumental Plaza México, que estremeció a la afición capitalina con un excelente colaborador “Fantasma” de la ganadería de Enrique Fraga.